TÚ ERES EL FRASCASO DE MI MATRIMONIO

UN FRACASO

"Hitler y Sabino Arana tenían una obsesión en común. La pureza de sus razas respectivas, la aria y la vasca. Hitler, con su poder omnímodo, convirtió su obsesión en un crimen masivo, sólo superado por su coetáneo Stalin. Arana no fue un asesino. Era un tonto iluminado, un tornatrás hacia la aldea, un beato de caricatura, pero no hay ni un solo indicio en sus escritos o en sus actos que autoricen a con¬fundir su descarado racismo con la afición por el exterminio de sus adversarios. De muchos de sus descendientes y alumnos no se puede decir lo mismo. La única inteligencia de Sabino Ara¬na se reunía en su capacidad de mentir, de fabular la historia. El mentiroso inteligente sabe que engaña, pero el tonto se termina creyendo sus propios infundios. A Hitler, en la Olimpiada de Berlín, un atleta negro le fastidió su teoría. Sus altos, perfectos, raquídeos y ágiles atle¬tas de pura raza aria fueron repetidamente vencidos por un norteamericano de color al que en una buena parte de su nación se le despreciaba por el tono de su piel. A Hitler le puso en ridículo una Olimpiada, y a Sabino Arana una fotografía.
Me refiero a la foto que inmortaliza el amable sa¬ludo que intercambiaron el «Lehendakari» Ibarreche y la dirigente de «Aukera Guztiak» Marije Rodríguez de Lera. Sabino Arana cantaba las cualidades de la raza vasca. Los hombres eran fuertes, altos, varoniles y apuestos. Las mu¬jeres, bellas y honestas, también altas, atractivas y gráciles. Una contemplación nada analítica de la fotografía en cuestión nos lleva a considerar un chasco la utopía de Arana. ¡Qué fealdad la de Marije! Soy de la opinión de que no hay una sola mujer en el mundo que no tenga un atractivo. Mejor escrito, era de la opinión.
Con Marije se ha hecho añicos mi opinión, que se tambalea -debo reconocerlo-, cuando vi por vez primera a Hebe de Bonafini. La gorda de la plaza de Junio -las madres de la Plaza de Mayo no quieren saber na¬da de ella-, comparada con Marije es casi una coqueta. Con el «Lehendakari» y Marije, Sabino Arana ha fracasado rotundamente. Y eso es bueno, porque humaniza el disparatado y excluyente racismo del funda¬dor del nacionalismo vasco, que dicho sea de paso, es un invento de anteayer. Se demuestra que en la bella Euskalerría hay personas tan feas y desencuadernadas de cuerpo como en el resto de España. Hombres y mujeres tan feos como nosotros, a los que Sabino Arana no nos concedió ni el beneficio de la duda estética. Con esa fotografía, el nacionalismo vasco se sitúa, al fin, en el mismo nivel de calología que el resto de la humanidad. Se constata que la evolución ha agrietado los cánones de belleza física exigidos por Sabino Arana para poder acceder a la exclusiva relación de los vascos de pura raza. El hallazgo se llama Marije.
Científicos habrá que se ocupen del caso, que, para mí, deja de tener en este momento el menor interés. Me limito a comentar una fotografía con una imagen sencillamente espeluznante. Y a recordar a los aranistas de pro que todos somos iguales, aunque en ocasiones, nos duela."

Alfonso USSÍA

Por mi parte solo añadir que me parece que el capullo de Sabino Arana nunca estuvo en las Islas Canarias, ni en Córdoba, ni en Zaragoza que allí también hay unas mozas…, ni en tantas otras ciudades y pueblos de España, donde la belleza femenina se hace habitual en sus calles y edificios, pero claro, para eso el zoquete tendría que haberse dado una vuelta por la España de su tiempo, que no sé por qué pero me da que no viajó mucho por su país, es más, seguro que conocía mejor Inglaterra que su propia nación, pero claro, como renegaba de ella…
Lo malo es que tíos como éste son capaces de convencer a varios cientos de miles de personas (en su caso) y lo peor es que personas de padres procedentes del resto del territorio español son los más nacionalistas (como por ejemplo Carod Rovira, un-dos-tres responda otra vez).
En fin correremos un estúpido velo y dejaremos que el capitán Spok y sus secuaces sigan creyendo que España es un país de mierda del que cualquiera que se empeñe se puede separar, como si este país fuera una república bananera.
Recordemos que la historia siempre se repite y que ningún país está dispuesto a ceder ni un solo cm. de su territorio así por las buenas. Y menos a los cuatro renegados de siempre (ilusos).

Y los españolitos de buena fe, los cuales tenemos claro que el mundo es redondo, que los muros son invención del hombre y que las religiones y costumbres están para enriquecer y no para envilecer, seguiremos trabajando para que este país, maravilloso y multicultural país, sea mejor cada día por la cuenta que nos trae. (A caso no es maravilloso ser y vivir en un país en el que cada zona tiene sus particularidades culturales, estos tíos están tontos)
Y por supuesto, tenemos que estar orgullosos de nuestra tierra o es que se piensan los nacionalistas periféricos (renegados más bien) que yo estoy menos orgulloso de ser de mi tierra que ellos de la suya, simplemente porque no soy nacionalista.